Seleccionar y adaptar las intervenciones

Para lograr cambios a menudo se requieren múltiples enfoques (o intervenciones de implementación) para abordar las barreras y los facilitadores evaluados (como se analizó en la sección anterior del Marco del conocimiento para la acción). Obtenga más información sobre estas estrategias en la sección siguiente.

Una vez identificados las barreras y los facilitadores para el uso del conocimiento, ya se puede seleccionar y adaptar e implementar el cambio de práctica en la institución. Para implementar de forma efectiva el cambio de práctica en su entorno, debe usar estrategias de implementación efectivas. Con una cuidada planificación, se pueden usar estas estrategias para abordar las barreras identificadas en la anterior fase del ciclo de acción.

Esta fase requiere una planificación detallada, que le ayudará a seleccionar las estrategias adecuadas y adaptarlas a su contexto local.

Estrategias de implementación

Las estrategias de implementación son métodos o técnicas empleados para mejorar la asimilación, la implementación y la sostenibilidad de una intervención, un programa o una práctica (Proctor et al., 2013). Existe una gran variedad de estrategias que contemplan distintas escalas, resultados previstos, entornos en los que se aplican, y distintos cambios de práctica o intervenciones que deben apoyarse. Por ejemplo, la taxonomía de las recomendaciones de expertos para la implementación del cambio (ERIC, Expert Recommendations for Implementing Change) (Powell et al., 2015) recoge 73 estrategias de implementación, y la taxonomía del cambio de conducta (Behaviour Change) incluye 93 estrategias (Michie et al., 2013) para instituciones sanitarias que pueden variar en cuanto a impacto y viabilidad (Powell et al., 2015; Waltz et al., 2015).

A continuación, se incluyen algunos ejemplos de estrategias de implantación de la taxonomía ERIC(Powell et al., 2015):

• Captar y compartir los conocimientos locales.
• Realizar visitas de divulgación educativa para informar a otros sobre la innovación.
• Identificar y preparar a impulsores.
• Informar a líderes de opinión locales de la innovación.
• Desarrollar un plan de implementación formal.
• Distribuir materiales formativos.
• Ofrecer supervisión clínica.
• Ofrecer recordatorios a los médicos.

Para acceder al documento que describe la taxonomía de ERIC, busque la sección "Más recursos" a continuación.

Es más probable que las estrategias de implementación adaptadas apoyen los esfuerzos de implementación. Los factores contextuales pueden influir en los resultados de la implementación a través de sus efectos en la forma en que los sistemas de apoyo o los sistemas de ejecución implementan estrategias o cómo funcionan las estrategias (Leeman y Nilsen, 2020).

Dos ejemplos:

1. La escasez de personal en una unidad de cuidados intensivos de gran actividad puede afectar a la capacidad del personal para participar plenamente en los procesos de implementación, lo que se traduce en un escaso uso de la nueva intervención.

• Puede ser preciso redefinir los procesos de implementación para que sean necesarias menos reuniones (o más cortas).

2. La escasez de personal también puede limitar el número de profesionales que la unidad envía a una actividad de aprendizaje colaborativo.

Es posible que el aprendizaje colaborativo deba convertirse a un formato mixto que combine una breve reunión en persona con una serie de teleconferencias.

Es más probable que se produzca un cambio positivo si se toma el tiempo necesario para planificar una implementación eficaz. Desafortunadamente, muchas estrategias se implementan sin un proceso planificado; a menudo se eligen basándose en el “sentido común” o en lo que ha funcionado en otra organización (Michie, 2011).

Considere revisar una variedad de estrategias y planificación y utilizar un proceso para identificar aquellas con mayor probabilidad de ser efectivas (Michie 2011). Por ejemplo, puede utilizar un enfoque planificado para seleccionar estrategias que aborden las barreras y aprovechen a los facilitadores en su entorno local.

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Evite el principio “ISLAGIATT”* (en su momento parecía una buena idea)

*Certificado por Marin Eccles, investigador de implementación, para implementar el cambio.

• Seleccionar y adaptar estrategias de implementación basadas en las barreras de práctica que desea abordar en su contexto.

• Elegir estrategias de implementación que puedan usarse en combinación o de forma independiente, según sus objetivos y su contexto. Ninguna estrategia es eficaz en todos los contextos o entornos; no existe una “talla única”. En algunos casos, puede ser más eficaz utilizar una sola estrategia y centrarse en un problema clave de implementación en lugar de intentar abordar numerosos problemas utilizando estrategias complejas y multifacéticas. (Lau et al., 2015; Squires et al., 2014)

• Usar más estrategias al mismo tiempo no siempre se traduce en mayores posibilidades de éxito en la implementación (Wuchner et al., 2014).
• La complejidad de estrategias puede diluir los beneficios del cambio de práctica y reducir la capacidad de los profesionales sanitarios de entender o adquirir la información que necesitan para el cambio de práctica (LaRocca et al., 2015).
• Utilice estrategias de implementación simples o únicas, ya que pueden ser tan efectivas como intervenciones múltiples o intervenciones con múltiples partes.
• Involucrar a varios miembros del personal y a otras personas para ayudar a determinar quién puede ayudar a identificar las barreras en su entorno.
• Identificar estrategias a tiempo en el proceso de cambio.
• Priorizar las estrategias que puedan abordar barreras potenciales y que sean factibles de implementar.

La tabla incluida a continuación muestra una serie de características de estrategias efectivas e inefectivas(LaRocca et al., 2012; Lau et al., 2015; Squires et al., 2012; Yost et al., 2015).

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Características de estrategias efectivas Interactivas Comunicación activa (se comunican a los responsables de la toma de decisiones en lugar de exigirles que accedan a dicha estrategia de forma independiente) Adaptadas a las necesidades de los usuarios finales Adaptadas para hacer frente a barreras relevantes para la institución Estatus elevado o positivo del individuo o el grupo encargado de la estrategia (por ejemplo, equipos multidisciplinares de líderes de opinión; formadores de prestigio) Muy accesibles

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Características de estrategias inefectivas Dependencia exclusiva de los formatos de enseñanza didáctica Retroalimentación poco frecuente Uso de un enfoque único que valga para todo Exposición o formación limitadas sobre la intervención; por ejemplo, una sesión formativa de un solo día puede no repercutir en la práctica de los participantes

Métodos para seleccionar y adaptar estrategias

En la tabla siguiente se describen tres enfoques para seleccionar y adaptar las estrategias, que se han extraído de la literatura. A continuación, se describen con más detalle los mapas de intervención y los mapas conceptuales.

Principales enfoques para seleccionar y adaptar estrategias

Fuente: Tabla adaptada de Powell et al., 2017.

Pasos para el mapeo de la intervención

A veces, es posible que desees promover una nueva práctica o una nueva intervención entre personas con experiencias vividas. Hay muchas estrategias que se pueden utilizar para involucrar a este grupo de personas. En términos generales, la taxonomía de evidencia del sistema de salud clasifica las estrategias centradas en la persona en seis categorías. (Chapman et al., 2020):

1. Información o educación: estrategias que permiten a los usuarios saber más sobre su tratamiento y su salud.
2. Apoyo al cambio de comportamiento: intervenciones que se centran en la adopción o el fomento de conductas de salud y de tratamiento a nivel individual, como la adherencia a medicamentos.
3. Desarrollo de habilidades y competencias: estrategias que se centran en la adquisición de habilidades relevantes para el automanejo.
4. Apoyo personal: intervenciones que proporcionen asistencia y estímulo para ayudar a los pacientes a afrontar y gestionar su salud y los problemas médicos en curso, como el asesoramiento y el seguimiento de la eficacia del tratamiento.
5. Facilitación de la comunicación y la toma de decisiones: estrategias para implicar a los usuarios en la toma de decisiones sobre la atención sanitaria.
6. Participación del sistema intervenciones para implicar a pacientes y cuidadores en los procesos de toma de decisiones a nivel del sistema.

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Vincular esta fase con elementos del Marco de Acción del Movimiento Social

La capacidad de su equipo de cambio para la fase de "Seleccionar y adaptar las intervenciones de implementación" puede mejorarse o acelerarse si se añaden algunos elementos del Marco de Acción del Movimiento Social, ya que los dos marcos son complementarios. Puede haber muchos otros puntos de conexión entre los dos marcos. A continuación, ofrecemos tres ejemplos que se pueden tener en cuenta:

• Los movimientos sociales y sus ejemplos son visibles: Al comprender los movimientos sociales, sus ejemplos y estrategias, el equipo de cambio y usted pueden identificar estrategias que se utilizaron en los movimientos sociales y que también pueden aplicarse a esta fase del Marco del Conocimiento a la Acción. Por ejemplo, la movilización de la acción individual y colectiva implica que las personas se reúnan para colaborar en pos de un objetivo compartido. Aplicar el pensamiento de los movimientos sociales y sus ejemplos a las intervenciones seleccionadas, adaptadas e implementadas puede fortalecer el enfoque del cambio.
• Visibilidad pública: Un componente clave del marco de acción del movimiento social es aumentar la visibilidad pública de las acciones individuales y colectivas. Su equipo de cambio y usted pueden usar la visibilidad pública como estrategia para poner de relieve el cambio de práctica pretendido. La visibilidad pública, usando por ejemplo medios sociales para aumentar la concienciación, añade credibilidad al cambio y ayuda a construir una masa crítica de partes interesadas involucradas en el cambio (Serna-Restrepo, et al 2018).
• Impulso: Su equipo de cambio y usted pueden considerar la posibilidad de implicar a las principales partes interesadas para impulsar el cambio de práctica. El impulso es un componente clave de los movimientos sociales: se crea mediante la planificación estratégica por un grupo de personas que participan activamente en el cambio. El impulso actúa como una fuerza motora que alimenta el cambio; por el contrario, cuando no hay impulso, la falta de energía que rodea el cambio puede tener un impacto negativo en la adopción de la práctica (Serna-Restrepo, et al, 2018).

Para más información sobre los vínculos dinámicos entre los elementos del marco de Acción del Movimiento Social y el marco del Conocimiento a la Acción, consulta la sección Dos marcos complementarios